Son muchas las dudas que surgen sobre el uso de los traductores automáticos. Si bien es cierto que prestan posibilidades de comprensión para el usuario particular, su uso indiscriminado, poco riguroso y sin la experiencia profesional de traductores nativos especializados en cada materia, no es recomendable para el ámbito empresarial.

En estos artículos esgrimimos  las razones para entender cómo funcionan y compararlos con el trabajo humano del traductor. Además explicaremos los riesgos que corremos al hacer uso de los traductores automáticos en el ámbito de las traducciones profesionales.